Publicado por Diario de Navarra.
Actualizada 03/12/2012 a las 08:27
En la imagen, el castillo de Cortes, situado entre la parroquia y su antigua huerta reconvertida en parque público. NURIA G. LANDA
Sus muros son testigos silenciosos de siglos de historia que Cortes no quiere dejar pasar. Y es que la compra en 1997 por parte del ayuntamiento del emblemático castillo de la localidad puso 'en manos' de sus vecinos esta fortaleza que a lo largo del tiempo había sido propiedad de diversos reyes navarros y nobles.
El ayuntamiento adquirió este castillo de origen musulmán y declaradoBien de Interés Turístico Cultural a los sucesores del conde de la Unión, quien lo habitó hasta su fallecimiento. Pagó 76 millones de las antiguas pesetas -456.769 euros-, 70 por el castillo y su huerta, que convirtió en un parque municipal de 25.000 metros cuadrados, y otros 6 por el antiguo cuartel de la guardia civil que estaba anexo y se derribó para ampliar la calle donde se ubicaba.
Desde entonces, fueron varios los usos que intentó darle el ayuntamiento, sin éxito. Lo propuso como sede de Bardenas, Parador Nacional, hotel y, finalmente, y tras invertir en mejoras como reparar sus tejados o impermeabilizar sus terrazas, sacó a concurso su gestión al no poder hacerse cargo de los gastos de mantenimiento de este gran edificio de 4.538 metros cuadrados de superficie construida. Pero el concurso quedó desierto.
Fue en 2007 cuando un grupo de vecinos, preocupado por el deterioro del castillo, emblema de Cortes, se unió para reformar con sus propias manos el ala derecha. Tras rehabilitar de forma altruista varias dependencias de esta parte del edificio, a principios de 2012 vieron cómo su trabajo recibía un espaldarazo con la concesión al ayuntamiento de una ayuda de 148.793 euros. Llegó el programa Eje 4 Leader del Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural para completar la reforma del ala derecha de cara a abrirla al público como recurso turístico.
El consistorio adjudicó los trabajos a la empresa Vaquebel SL por 225.380 euros y asume la cantidad restante de la ayuda. La obra se inició en agosto, va a buen ritmo y se prevé que acabe en febrero de 2013. Incluye la adecuación del patio de armas, el torreón, la habitación de té, la sala de baile y el vestidor de la duquesa.
Cortes apuesta por esta obra junto con la inclusión este año del edificio en la Ruta de los Castillos de Navarra, para impulsar el futuro de su emblema.
El ayuntamiento adquirió este castillo de origen musulmán y declaradoBien de Interés Turístico Cultural a los sucesores del conde de la Unión, quien lo habitó hasta su fallecimiento. Pagó 76 millones de las antiguas pesetas -456.769 euros-, 70 por el castillo y su huerta, que convirtió en un parque municipal de 25.000 metros cuadrados, y otros 6 por el antiguo cuartel de la guardia civil que estaba anexo y se derribó para ampliar la calle donde se ubicaba.
Desde entonces, fueron varios los usos que intentó darle el ayuntamiento, sin éxito. Lo propuso como sede de Bardenas, Parador Nacional, hotel y, finalmente, y tras invertir en mejoras como reparar sus tejados o impermeabilizar sus terrazas, sacó a concurso su gestión al no poder hacerse cargo de los gastos de mantenimiento de este gran edificio de 4.538 metros cuadrados de superficie construida. Pero el concurso quedó desierto.
Fue en 2007 cuando un grupo de vecinos, preocupado por el deterioro del castillo, emblema de Cortes, se unió para reformar con sus propias manos el ala derecha. Tras rehabilitar de forma altruista varias dependencias de esta parte del edificio, a principios de 2012 vieron cómo su trabajo recibía un espaldarazo con la concesión al ayuntamiento de una ayuda de 148.793 euros. Llegó el programa Eje 4 Leader del Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural para completar la reforma del ala derecha de cara a abrirla al público como recurso turístico.
El consistorio adjudicó los trabajos a la empresa Vaquebel SL por 225.380 euros y asume la cantidad restante de la ayuda. La obra se inició en agosto, va a buen ritmo y se prevé que acabe en febrero de 2013. Incluye la adecuación del patio de armas, el torreón, la habitación de té, la sala de baile y el vestidor de la duquesa.
Cortes apuesta por esta obra junto con la inclusión este año del edificio en la Ruta de los Castillos de Navarra, para impulsar el futuro de su emblema.