Publicado por Diario de Noticias.
VARIAS LLAMADAS NO PUDIERON SER ATENDIDAS EN TUDELA
Todos los agentes y la brigada tuvieron que trasladar equipos, armas y enseres por la riada
NIEVES ARIGITA - Sábado, 2 de Febrero de 2013 - Actualizado a las 05:06h
Ricardo Casamián, César Pérez, Víctor Gayarre, Francisco José Orta y Roberto Urra. (N.A.)
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TUDELA. Además de la penosa imagen que ofrecieron al ser los primeros en tener que desalojar su sede, los agentes de Policía Municipal de Tudela se vieron obligados, el pasado 18 de enero a consecuencia de la riada, a abandonar sus obligaciones y dedicarse a salvar equipos informáticos, guardar armas en las instalaciones de Protección Civil o trasladar sus walkies y porras a sus propios domicilios. El desalojo, el tercero junto a los de 2003 y 2007, puso de manifiesto una vez más las precarias condiciones de ubicación y estado de una comisaría que, según manifestaron ayer los delegados sindicales del Cuerpo, "ha sido el hazmerreír de España, saliendo en los medios de comunicación nacionales y dando una lamentable imagen".
Al caos que supuso la riada, que obligó a movilizar a los 60 agentes de Policía Municipal tanto de servicio como de fiesta, a los miembros de la brigada y a la grúa municipal, se unen los perjuicios que repercutieron en los ciudadanos y el coste, todavía no cuantificado, que tendrán los daños en el edificio y el pago de las extras. Como ellos mismos explicaron, "entre las situaciones que no se pudieron atender, estuvo una llamada del colegio San Julián, donde había saltado la alarma. No fue atendida porque no había patrullas disponibles".
Entre los costes extras que habrá que asumir está la reparación del depósito de gasoil de la calefacción de la sede, que se llenó de agua. La avería, además de dejar a los agentes sin calefacción dos semanas, puede tener un coste de entre 3.000 y 4.000 euros. "Parece ser que el dinero es del Ayuntamiento y no de los contribuyentes puesto que esta situación y gastos no afectan a los ciudadanos, según declaraciones de un concejal del equipo de gobierno", afirmaron con ironía los delegados.
RESPONSABILIDADES La deplorable situación de El Molinar, un edificio situado en una zona catalogada por la CHE como inundable, dura ya más de diez años. Cables colgando, pantallas de videovigilancia que no funcionan, ratas, focos de la fachada hundidos, enchufes colgando... Los agentes recordaron que "recientemente estuvimos sin acceso directo a la ciudad por las obras de reparación en la acequia de Mosquera". Pese a todo, el Ayuntamiento decidió invertir, hace tres años, 120.000 euros en el inmueble, una medida que la Policía Municipal ya advirtió que "no era buena porque el edificio en sí es inoperativo por su situación geográfica y el estado en el que se encuentra".
Por todo ello, apelaron al actual responsable del Cuerpo, el propio alcalde Luis Casado, y al jefe de Policía Municipal y les acusaron de "no haber estado a la altura" de sus responsabilidades. Desvelaron también que el día de la riada, Protección Civil tuvo que dejarles cinta de balizamiento para acordonar las zonas inundables.